Tuba
La tuba, el más grave de los instrumentos de viento metal, proviene del serpentón y el oficleique. Aparecida alrededor de 1835 de la mano de Wilhelm Wieprecht y Johann Gottfried Mortiz, tal y como la conocemos hoy en día, no fue introducida en la orquesta sinfónica hasta alrededor del año 1875, con Richard Wagner en su “Anillo del Nibelungo”, donde adquirió las características que le permitieron servir de soporte como instrumento bajo a las trompetas y trombones.
Es instrumento indispensable en las “bandas de música”, así como en otras agrupaciones de viento metal, donde es muy común encontrar el llamado “bombardino” o “tuba (tenor) francesa”.
Posee unos graves muy profundos así como un registro medio-grave más poderoso y un registro agudo de barítono un poco más delgado pero intenso, que le permiten servir de refuerzo de las cuerdas, el viento madera o ser utilizado como instrumento a solo. Además puede realizar una gran variedad de contraste dinámico entre sonidos fuertes o suaves.
En la orquesta posee obras de importantes compositores como Richard Strauss, Gustav Holst (Los Planetas), entre otros.
La tuba, dentro de la música popular del siglo XX, aparece como instrumento fundamental dentro del ”Dixieland”, movimiento musical a caballo entre el Jazz de Nueva Orleans y el Jazz Clásico, haciendo el papel del contrabajo actual, en bandas como las de Buddy Bolden, Jack Laine, Kid Ory, Keppard Freddie, King Oliver, y la Original Dixieland Jazz.
Recomendamos que antes de comprar un instrumento consulte con el profesor para que le asesore acerca de las mejores opciones posibles.
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